¿Por qué mantener una vivienda vacía puede ser una carga económica?

Aunque no haya nadie viviendo en la propiedad, no significa que no haya gastos. De hecho, una vivienda vacía puede generar costes fijos y variables que suman una cantidad importante de dinero al año. Aquí te contamos los más relevantes:

Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI)

Este impuesto municipal grava la titularidad del inmueble independientemente de que esté habitado o no. Su importe varía según el valor catastral y la ubicación de la vivienda, pero normalmente supone un gasto anual importante para cualquier propietario.

Gastos de comunidad y mantenimiento de zonas comunes

Si la vivienda forma parte de una comunidad de vecinos, deberás seguir pagando las cuotas de mantenimiento. Esto incluye servicios como limpieza, seguridad, ascensores, jardinería y otros gastos comunes, los cuales no se detienen solo porque la casa esté vacía.

Servicios básicos y suministros mínimos

Aunque no se utilicen activamente, servicios como agua, luz y gas suelen tener tarifas mínimas que se deben pagar. En algunos casos, mantener los suministros activos es aconsejable para evitar problemas con tuberías o instalaciones eléctricas, pero esto genera un coste continuo.

Seguro del hogar

Contar con un seguro de hogar en una vivienda vacía es fundamental para protegerla ante posibles daños, incendios, robos o desperfectos. Este seguro suele tener un coste anual que varía según la póliza y la cobertura contratada.

Mantenimiento preventivo y reparaciones

Una casa sin uso corre el riesgo de deteriorarse con mayor rapidez. Humedades, filtraciones, moho o daños estructurales pueden aparecer y convertirse en reparaciones costosas si no se realiza un mantenimiento adecuado y periódico.

¿Cuánto cuesta realmente mantener una vivienda vacía?

En promedio, según estudios del sector inmobiliario, mantener una vivienda vacía puede costar entre 2.000 y 5.000 euros anuales, dependiendo de factores como la ubicación, tamaño, servicios y estado general de la propiedad. Este gasto puede incrementarse si la propiedad se encuentra en zonas donde el IBI es alto o si la comunidad tiene cuotas elevadas.

Riesgos asociados a mantener una vivienda vacía

Ocupación ilegal o “okupas”

Las viviendas vacías son objetivos comunes para ocupaciones ilegales, especialmente en áreas urbanas o con alta demanda de vivienda. Esto no solo implica la pérdida temporal de la propiedad, sino también la posible necesidad de afrontar procesos legales largos y costosos para recuperar el inmueble.

Vandalismo y robos

La falta de vigilancia puede atraer actos vandálicos o robos, que pueden generar daños considerables y gastos adicionales en reparaciones y seguridad.

Deterioro acelerado por falta de uso

Las viviendas desocupadas sufren con mayor rapidez problemas como humedades, moho, plagas y daños en las instalaciones. Esto se debe a la falta de ventilación, uso y supervisión constante.

Recargos fiscales por viviendas vacías

Algunas administraciones locales aplican recargos en el impuesto IBI para las viviendas consideradas vacías durante períodos prolongados, con el objetivo de incentivar su uso o venta.

¿Cuándo es recomendable vender una vivienda vacía?

La decisión de vender o no una vivienda vacía debe tomarse analizando varios aspectos clave:

• Necesidad de liquidez inmediata: Si necesitas disponer de dinero para otros proyectos, inversión o para cubrir gastos, vender puede ser la opción más rápida y segura.
• Falta de tiempo o recursos para gestionarla: Alquilar una vivienda requiere gestión, tiempo y recursos. Si no estás dispuesto a asumir estas responsabilidades, la venta puede liberarte de esta carga.
• Condiciones favorables del mercado inmobiliario: Si el mercado está en alza y los precios son atractivos, puede ser el momento perfecto para vender y obtener una buena rentabilidad.
• Evitar gastos y riesgos a largo plazo: Vender una vivienda vacía elimina los gastos recurrentes y riesgos mencionados anteriormente, proporcionando tranquilidad y estabilidad financiera.

Alternativas para rentabilizar una vivienda vacía

Si no quieres vender tu vivienda, existen formas de sacarle rendimiento económico:

Alquiler tradicional

Ofrecer la vivienda en alquiler puede generar ingresos mensuales estables y ayudarte a cubrir los gastos de mantenimiento.

Alquiler vacacional

En zonas turísticas, el alquiler vacacional puede ser muy rentable. Sin embargo, requiere una gestión más activa, mantenimiento frecuente y adaptación a la normativa local.

Reformas para mejorar su valor

Invertir en reformas o mejoras puede aumentar considerablemente el valor de la propiedad, tanto para una futura venta como para obtener un mejor precio de alquiler.

Uso personal o familiar

Otra opción es utilizar la vivienda para uso propio o de familiares, evitando así que permanezca vacía y reduciendo riesgos.

Consejos prácticos para propietarios de viviendas vacías

• Mantenimiento periódico: Realiza revisiones y mantenimientos para evitar daños graves.
• Seguridad: Instala sistemas de alarma o cámaras para prevenir ocupaciones y robos.
• Gestiona los suministros: Mantén activos solo los servicios necesarios para reducir costes.
• Consulta con profesionales: Acude a inmobiliarias o asesores para valorar la mejor estrategia según tu caso.

Conclusión

Mantener una vivienda vacía representa una carga económica y riesgos que pueden afectar gravemente tu patrimonio y tranquilidad. Por ello, es fundamental analizar bien tus opciones y decidir si vender es la mejor solución para ti o si prefieres otras formas de rentabilizar el inmueble.

Si decides vender, confía en expertos para obtener el mejor precio y agilizar el proceso. En Alfa Casa, contamos con amplia experiencia en la compra y venta de viviendas, ayudándote a tomar la mejor decisión en el mercado actual. Para más información útil sobre la gestión de viviendas vacías, te recomendamos visitar este artículo de Idealista.